Refugio ante el Desastre
En muchas ocasiones reconocemos en otros las actitudes que nosotros tomaríamos si estaríamos en su lugar.
Recientemente vi un paciente de 64 años de edad Haitiano de nacionalidad. Hacia un año, le habían extirpado la vejiga urinaria y la próstata debido a Carcinoma .Le habían fabricado una vejiga con parte del intestino. Era el segundo caso de reconstrucción vesical que había visto en mi vida. Al comenzar el examen sonografico -siempre lo comienzo por el mismo lugar- cuando llego al hígado, noto que esta sembrado de metástasis solidas y quisticas. Casi no hay lugar a dudas, el pobre hombre, no tenia futuro y a mi se me había jodido el día, digo esto ultimo porque siempre me pasa cuando veo un caso sin futuro, el resto del día y parte de la noche es dándole vueltas en mi cabeza a lo triste e injusto de la situación.
La esposa del paciente estaba presente, trato de una manera suave de indagar mas de la situación y me dicen que lo habían operado en Francia, me preguntan si la Ecografía y la sonografia eran diferentes, le explico que es lo mismo, solo que los Anglosajones, sobre todo los Norteamericanos y los Europeos, le llaman de modo diferentes, aunque , incluso etimologicamente signifiquen lo mismo, me explican que se comunican vía Internet con su medico en Francia y que de ese modo fue que este le indicó la Sonografia & Ecografía. Le pregunto si después de la cirugía de hace un año, no había recibido ningún otro tratamiento, me dicen que no, solo le hicieron unos análisis de sangre que fueron normales y eso fue hace medio año. Según me van contando me voy dando cuenta que el paciente luce muy tranquilo y como resignado y a pesar de que mi expresión facial denota cierto grado de ansiedad, solo al final, ella se decide a preguntar que he encontrado en la sonografia, antes de contestar, miro a los ojos al señor y me convenzo de que ya sabe-por intuición -,lo que voy a decir, y me decido por tanto a explicar la situación de la manera más delicada que puedo.... Tanto el como ella reciben la noticia sin el menor asomo de asombro, susto o preocupación aparente, con mucho aplomo, lo cual termina de convencerme de que todo ha sido meticulosamente calculado y decidido hace tiempo: Quiere morir en paz, sin que le atosiguen con todas las monsergas, aparatos y espectacularidad que solemos desplegar los médicos ante los casos desesperados. Ese convencimiento me golpea rudamente ya que uno esta preparado mentalmente para lo contrario, los lloros, la desesperación, las preguntas angustiadas, etc. Cuando yo creía que iba a poder reprenderlo por su actitud, comencé a reaccionar en sentido contrario, un gran respeto ante una decisión que tuvo que ir precedida de una discusión profunda y majestuosa de lo que es vida de cada uno y lo que cada quien quiere hacer con la suya propia. Tal convencimiento me desarmó por completo y dio paso a un sentimiento de admiración solidaria y la envidia de estar delante de un ser superior a mi, que fue capaz, en momentos tan dramáticos de superar la pequeñez del ser humano vulgar, que se aferra a la vida, aunque esta sea mantenida de una forma inhumana y sobre todo sufriendo muchos dolores innecesarios.
En el fondo, muchas ocasiones en mi interior he pensado que en situación similar, yo haría lo mismo. Lo que no sé a ciencia cierta , es si seré capaz de tener el valor suficiente para lograrlo y para superar las presiones de familiares y amigos, que siempre te van a aconsejar en sentido contrario.
Recientemente vi un paciente de 64 años de edad Haitiano de nacionalidad. Hacia un año, le habían extirpado la vejiga urinaria y la próstata debido a Carcinoma .Le habían fabricado una vejiga con parte del intestino. Era el segundo caso de reconstrucción vesical que había visto en mi vida. Al comenzar el examen sonografico -siempre lo comienzo por el mismo lugar- cuando llego al hígado, noto que esta sembrado de metástasis solidas y quisticas. Casi no hay lugar a dudas, el pobre hombre, no tenia futuro y a mi se me había jodido el día, digo esto ultimo porque siempre me pasa cuando veo un caso sin futuro, el resto del día y parte de la noche es dándole vueltas en mi cabeza a lo triste e injusto de la situación.
La esposa del paciente estaba presente, trato de una manera suave de indagar mas de la situación y me dicen que lo habían operado en Francia, me preguntan si la Ecografía y la sonografia eran diferentes, le explico que es lo mismo, solo que los Anglosajones, sobre todo los Norteamericanos y los Europeos, le llaman de modo diferentes, aunque , incluso etimologicamente signifiquen lo mismo, me explican que se comunican vía Internet con su medico en Francia y que de ese modo fue que este le indicó la Sonografia & Ecografía. Le pregunto si después de la cirugía de hace un año, no había recibido ningún otro tratamiento, me dicen que no, solo le hicieron unos análisis de sangre que fueron normales y eso fue hace medio año. Según me van contando me voy dando cuenta que el paciente luce muy tranquilo y como resignado y a pesar de que mi expresión facial denota cierto grado de ansiedad, solo al final, ella se decide a preguntar que he encontrado en la sonografia, antes de contestar, miro a los ojos al señor y me convenzo de que ya sabe-por intuición -,lo que voy a decir, y me decido por tanto a explicar la situación de la manera más delicada que puedo.... Tanto el como ella reciben la noticia sin el menor asomo de asombro, susto o preocupación aparente, con mucho aplomo, lo cual termina de convencerme de que todo ha sido meticulosamente calculado y decidido hace tiempo: Quiere morir en paz, sin que le atosiguen con todas las monsergas, aparatos y espectacularidad que solemos desplegar los médicos ante los casos desesperados. Ese convencimiento me golpea rudamente ya que uno esta preparado mentalmente para lo contrario, los lloros, la desesperación, las preguntas angustiadas, etc. Cuando yo creía que iba a poder reprenderlo por su actitud, comencé a reaccionar en sentido contrario, un gran respeto ante una decisión que tuvo que ir precedida de una discusión profunda y majestuosa de lo que es vida de cada uno y lo que cada quien quiere hacer con la suya propia. Tal convencimiento me desarmó por completo y dio paso a un sentimiento de admiración solidaria y la envidia de estar delante de un ser superior a mi, que fue capaz, en momentos tan dramáticos de superar la pequeñez del ser humano vulgar, que se aferra a la vida, aunque esta sea mantenida de una forma inhumana y sobre todo sufriendo muchos dolores innecesarios.
En el fondo, muchas ocasiones en mi interior he pensado que en situación similar, yo haría lo mismo. Lo que no sé a ciencia cierta , es si seré capaz de tener el valor suficiente para lograrlo y para superar las presiones de familiares y amigos, que siempre te van a aconsejar en sentido contrario.